Encendió un cigarrillo y dio una larga calada. Bajó en el
ascensor y en el rellano se encontró con la señora Mariana, que lo fulminó con
la mirada por haberse encendido el piti en el edificio.
—No se puede fumar en el ascensor —Vociferó con su voz
aflautada.
—Lo siento, señora Mariana —Se disculpó abriéndole la puerta
y ayudándola a meter el carro y las bolsas de la compra.
La anciana no le dio las gracias, pero le dio igual.
Dio otra calada y salió a la calle. El cielo estaba nublado
y amenazaba lluvia. Puso rumbo al bar del centro. Tiró la colilla en una
papelera y se encendió un segundo cigarrillo.
Al pasar por la puerta del supermercado un mendigo le pidió
unas monedas. Él, sin embargo, le dio el
cigarrillo, se metió en el super y salió con un par de sándwiches y un café.
—No hace falta que me des las gracias —le dijo dándole la
compra— Y puedes quedarte con el piti, que yo me enciendo otro.
—Yo no quería esto, tío.—se quejó el mendigo.
No le importaron las quejas, porque si quería dinero para
drogas, él no se lo iba a dar.
Encendió el tercero del día (que en realidad podía
considerarse el segundo) y en el paso de peatones ayudó a un anciano a empujar
su silla de ruedas. En el cruce de la calle Encinas, cuando ya iba por el
cuarto, a una mujer se le cayó al suelo uno de los zapatitos del bebé y tuvo
que gritarle para devolvérselo. A ella no le hizo gracia que le echara el humo
en la cara, sin querer, y se marchó malhumorada.
Cuando por fin llegó al bar, ya iba por el quinto.
—¡Aquí dentro, no! —Le recordó chillando él Genaro.
Lo apagó en la suela del zapato y pidió su café de siempre,
mientras iba a la maquina a sacar un paquete nuevo. Invitó de paso al señor
Braulio, como tenía por costumbre hacer.
—Sabes... —le dijo al Genaro— los cigarrillos de hoy en día
duran cada vez menos.
Y a Genaro no le quedó otra que callar y no decirle que el
problema era que él, fumaba demasiado.
Pues... ultimamente están siendo relatos pésimos, pero es lo que tiene no tener casi tiempo libre. Lo que más detesto en una persona es que fume. Pueden ser los mejores del mundo, pero no soporto ese vicio porque no le veo nada bueno. Y sí, vale, puede que sea hacer trampas, perooo es lo que hay XD
**Relato correspondiente a Literup 52 retos-de-escritura-para-2022. Vigésimo quinta semana, Haz una historia sobre un personaje que contenga los mayores defectos que detestas e intenta que sea una persona entrañable a pesar de ellos.
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